El
hombre absurdo
Ernesto Cera Tecla
CAMUS, Alberto. El extranjero, EMECÉ, Argentina,
2006. Pp. 159.
Albert Camus (1913-1960) es un escritor Pie
negro, es decir, un francés nacido en Argelia. Su primera obra “Al derecho y al
revés” (1937) marcó el inicio de su carrera literaria rica y variada: novelas,
obras de teatro, poemas, ensayos filosóficos. Entre su vasta obra, destacan:
Revuelta en las Asturias (teatro, 1936), Bodas (ensayo, 1939), La muerte feliz
(novela, 1939), entre otros. En El extranjero (novela, 1942), El mito de Sísifo
(ensayo, 1942), Calígula (teatro, 1942), Camus plantea un ciclo de reflexión
sobre lo absurdo de la condición humana. En El extranjero, el autor describe la
existencia de un empleado de oficina en Argelia, Meursault. En general, Meursault es un personaje que, un
día después del entierro de su madre, va
a nadar al puerto, inicia una relación
de amantes con María, ve una película cómica con ella, mata a un árabe a causa
del sol y la víspera de su ejecución afirma que ha sido feliz y que sigue feliz.
El extranjero se compone de dos partes. La primera
tiene seis capítulos y la segunda, cinco.
En la primera parte, Meursault
ama la vida, pero es indiferente a la muerte de su madre, al amor, a la
amistad, al éxito profesional, al matrimonio y a la vida monótona. En la
segunda parte, Meursault aparece en el
banquillo de los acusados, pero no pierde la lucidez. Entiende que la vida o el
mundo no tiene sentido. A contrario,
para las personas que lo condenan a la pena capital, la vida sí tiene sentido:
creen Dios, en las reglas y los valores. En suma, la primera parte describe a
un hombre que no encuentra sentido en el mundo silencioso y, la segunda parte,
a un hombre que se concilia con el mundo absurdo.
En los dos primeros capítulos de la primera parte,
Meursault asiste al entierro de su madre y encuentra a su amante: María
Cardona. Meursault se entera de la
muerte de su madre y asiste a su funeral. Se entrevista con el director del
asilo. Rechaza ver el cuerpo de su madre por última vez, acepta un café que le
ofrecen y fuma un cigarro frente al ataúd. A la mañana siguiente, participa en el cortejo fúnebre. La procesión
es marcada por un calor incandescente. Después del entierro de su madre,
Meursault se dirige a la playa y reencuentra a María Cardona. Al final, Meursault
la invita al cine, pasan la noche juntos en su departamento y se hacen amantes.
En el capítulo tres y cuatro, Meursault regresa a
casa y se va al mar con María. De
regreso al departamento, Meursault encuentra a su vecino Salamano y a Raymundo.
Raymundo lo invita a su habitación y le pide que le escriba una carta para su
amante. Meursault escribe la carta. Después de una semana ordinaria, Maursault
se va a la playa con María. De regreso, María intenta
asegurar sus sentimientos, pero Meursault es indiferente. De momento,
escuchan la disputa entre Raymundo y su amante. La pelea termina en la
Comisaría de la policía. Maursault declara a favor de Raymundo y éste es
liberado. Pasan juntos la tarde del
domingo. Para terminar, Meursault encuentra
a Salamano afligido y le viene un recuerdo de su madre.
En el capítulo cinco y seis, Meursault, María y
Raymundo pasan un domingo en el mar. Meursault
es invitados por Raymundo a pasar el domingo en la cabaña de Masson. Meursault
recibe una oferta de empleo en París, pero la rechaza. También niega la
propuesta de matrimonio de María. Meursault, María y Raymundo van a la Cabaña
de Masson. Después de la comida, los
tres hombres pasean en la playa y encuentran a dos árabes, uno de ellos es el
hermano de la amante de Raymundo. Raymundo y Masson se baten con ellos. Uno de
los árabes saca una navaja e hiere a Raymundo. En el segundo enfrentamiento, Meursault
le pide a Raymundo le entregue su arma para evitar un crimen. Más tarde, Meursault
regresa a la playa con el revólver y encuentra al árabe con una navaja.
Inundado de sudor, le dispara una vez, luego, cuatro veces. En fin, agobiado por el sol y el calor, es
consciente de su crimen.
En los primeros tres capítulos de la segunda
parte, Meursault es detenido, llevado a
prisión y procesado. Meursault es
interrogado. Su actitud indiferente irrita al juez y a su bogado. El juez le
habla de Dios. Meursault no quiere perder el tiempo en Dios. En su celda, se incomoda en los primeros días, pero
luego se adapta. Extraña los cigarros, las mujeres y el mar. María lo visita
una vez. Meursault debuta en el proceso
judicial. Se siente un intruso en medio de los jueces, abogados y espectadores.
El juez le hace preguntas de su madre y
de la muerte del árabe. Meursault le responde que todo fue al azar. Los testimonios
manifiestan la indiferencia de Meursault en el funeral de su madre. En
definitiva, el procurador considera que Meursault mató moralmente a su madre.
En el cuarto y quinto capítulo, Meursault se siente
exluido del proceso y discute con el Capellán. Mursault no se reconoce en
ninguno de los personajes construidos por el abogado y el procurador. El primero antepone
la provocación del árabe y la honestidad de Meursault; el segundo, ve a un
parracida que ha premiditado su acto criminal. Lo califica de monstruo que no cabe en la socied. Maursault insiste
que acto estuvo dictado por el sol. El presidente de la Corte, pone fin a su
veredicto y Meursault es condenado a muerte. Meursault, acepta finalmente hablar con el Capellán, pero su discurso le
aburre y prefiere contradecirlo e injuriarlo. Después de la catarsis, piensa en su madre y el señor
Pérez. En pocas palabras, Meursault acepta la pena de muerte, se concilia con el mundo absurdo y desea que muchas
personas asistan a su ejecución y que sea recibido por gritos de odio.
Grosso modo,
El extranjero enseña a no creer en otra vida, ni en la esperanza de una
vida mejor, sino a vivir para el momento presente: el aquí y el ahora. A realizarse sin detenerse en los valores convencionales (porque todo vale), a disfrutar el tiempo que se tiene en la vida. Además, es una novela fácil de
leer, tiene un lenguaje claro y figurativo, es místico y acerca el mundo
como es: absurdo. En consecuencia, la
novela es recomendable para jóvenes y adultos porque ambos deben filosofar para la salud del alma.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio