Votación
por usos y costumbres en Tetelcingo
Ernesto Cera Tecla.
El día de ayer, martes 21 de diciembre de 2021, se llevó a
cabo, en la plaza principal de Tetelcingo, la asamblea general extraordinaria
para validar o no, la participación de una nueva planilla para la elección de
la autoridad local o Delegado (a)
político. La asamblea general fue convocada por el Delegado político,
Lázaro Becerro, para dar cumplimiento estricto a la resolución del Tribunal electoral de la
entidad, debido a la queja interpuesta por la indígena Araceli Xixitla
(Véase, https://bit.ly/3yLTl2g).
En la asamblea estuvieron presentes,
como testigos oculares, las demás
autoridades tradicionales del pueblo: de la Casa ejidal, del Sistema independiente
de agua potable y del Comité de junta de mejoramiento moral, cívico y material.
También fueron testigos oculares, varios medios de comunicación de la entidad. La
reunión inició a las seis de la tarde,
en medio de una cultura cívica: al inicio, los mosiehualte de ambos bandos
convivían sin mayor problema. La violencia, en cualquiera de sus formas, estuvo
ausente. Participaron más de quinientas personas. La asamblea indígena fue
ejemplar, demostró que los usos y costumbres abonan a la vida democrática de
México. Bajo la participación a mano alzada y en “pelotón”, la asamblea general,
extraordinaria y soberana, determinó que, en el presente proceso electoral de la comunidad, no debe participar
la planilla en cuestión: Tonochti, por difamar y levantar infundios en contra
del pueblo de Tetelcingo.
La asamblea general extraordinaria refrendó la
vigencia del sistema normativo interno de la comunidad tetelcinga. Según el
artículo 25, numeral 4, de la Ley general de instituciones y procedimientos
electorales, establece: “Los pueblos y comunidades indígenas… elegirán, de
acuerdo con sus principios, normas, procedimientos y prácticas tradicionales, a
las autoridades o representantes para el ejercicio de sus formas propias de
gobierno interno, garantizando la participación de hombres y mujeres en
condiciones de igualdad…”[1] De aquí
se deduce que el sistema electoral mexicano tiene tres formas distintas de
votación: la directa (votación por cargos de elección popular), indirecta (votación
por lista de partidos para elegir
diputados y senadores) y la votación por usos y costumbres, que es exclusiva,
según el artículo segundo de la Constitución federal, de las comunidades
indígenas del país. La asamblea extraordinaria del día de ayer se llevó a cabo
en esta última modalidad de votación. En la asamblea estuvieron presentes
hombres y mujeres, en iguales condiciones, no hubo ningún signo de
discriminación política por el hecho de ser mujer o ser indígena. En tal
sentido, la resolución, a mano alzada y en “pelotón”, tiene toda legitimidad
del sistema normativo interno, la Constitución federal y los Tratados
internacionales: la planilla Tonochti queda fuera del proceso electoral para
elegir a la autoridad de la comunidad.
La quejosa Araceli Xixitla no logró, como aseguraba
ante los medios de comunicación, el apoyo de la mayoría de los tetelcingas. En
la reunión, fue respaldada por un grupo de menos de cien personas y un ayudante
de trece del territorio de Tetelcingo. El resolutivo de la asamblea demuestra
que la acusación de la quejosa es falsa, que no tiene fundamento, que no se le
está discriminando por ser mujer. Más bien, a esta política indígena le hace
falta un trabajo político de a pie, a todo terreno, para ganar la confianza y
el apoyo de los mosiehualte. A pesar, que la asamblea fue ejemplar, Araceli
Xixitla se ha volcado contra el Delegado político y los participantes en la
asamblea. Ha denunciado ante los medios de comunicación que la asamblea general
extraordinaria fue amañada por las
planillas, que la han amenazado de muerte, que la privan de su derecho político
por ser mujer y etc. Sin embargo, videos, fotografías, testigos oculares, entre
otros, demuestran todo lo contrario. En todo el transcurso de la asamblea su
persona fue respetada. Incluso, se le pidió que pasara al estrado, si era su
voluntad, se leyó todo el documento de queja ante el Tribunal electoral…
Entonces, su actitud de rechazo a los usos y costumbres tiene una sola
explicación: es una mujer alentada por grupos políticos externos que han obstaculizado
e impiden la municipalización del pueblo de Tetelcingo.
Los medios de comunicación fortalecen la democracia
por usos y costumbres en Tetelcingo, pero también existe el hampa del
periodismo que la obstruye. Algunos medios de comunicación como El sitio informativo y otros, hicieron
su trabajo periodístico profesional, informaron de la asamblea general a su
audiencia.[2] Sin
embargo, otros, como Noticias de Cuautla,
se comportaron como hampones del periodismo, es decir, se dedicaron a desinformar
a la población. En el texto informativo “Impiden en asamblea que Araceli Xixitla
fuera candidata en Tetelcingo”, firmada por Tere Ortega y la columna “Matan abusos y malas costumbres el progreso en Tetelcingo”, firmada por Andrés
Salas, se dice que la asamblea fue “a
modo”, que sólo asistieron 498 personas de un promedio de 20 mil y que no se
cumplió el 50 por ciento más uno, que no se acató la disposición del Tribunal
electoral, porque se votó en bloque y no a mano alzada; que el Delegado
político corrió, después de la asamblea a refugiarse, etc.[3] Toda
esta información está lejos de un periodismo profesional y ético. 1.- La
asamblea general extraordinaria fue abierta, ejemplar, a nadie se le impidió
participar. Es cierto que estuvieron simpatizantes de las planillas, pero
también tetelcingas que no necesariamente participan en las planillas. 2.- En
efecto, participaron, 498 personas, por usos y costumbres de la comunidad, no a
través del voto universal, libre y secreto, mediante una lista de electores
(les sugiero estudien el voto por usos y costumbres). 3.- El conteo sí fue en bloque, porque hubo
dificultad para contabilizar de manera individual, sin embargo, fue claro que
en bloque y a mano alzada, la mayoría votó por anular la participación de la
nueva planilla en el proceso electoral. 4.- El delegado político o cualquier
autoridad tiene derecho a dar o no una conferencia de prensa, es su derecho
hacerla cuando así lo considere necesario. En resumen, los hampones del periodismo deben contribuir a
la democracia de los pueblos indígenas y de México, no ha obstaculizarla.
De todo lo anterior, se deduce que el sistema normativo interno de la comunidad
de Tetelcingo sigue vigente. Que la autodeterminación política de la comunidad
no impide la participación de las mujeres u otro grupo social diferente.
También se entiende que el sistema electoral mexicano se fortalece al refrendar
una votación por usos y costumbres. Después de esta asamblea general
extraordinaria, el proceso electoral debe seguir su curso con las cinco
planillas participantes, pues así lo ha mandatado el pueblo originario. Por último, los mosiehualte
debemos estar alertas de los agentes internos y externos que quieren
desestabilizar a la comunidad o acabar con las prácticas políticas ancestrales. Ma mochichua, ma motequepano, quiene
tocostumbre.. “Que se haga, que se siga haciendo, como es nuestra
costumbre (pensamiento motloquiehual).
[1]
Cfr. Cámara de diputados del H. Congreso de la
unión. Ley general de instituciones y
procedimientos electorales. Consultado el 22 de diciembre de 2021 de https://bit.ly/3eeQbL1
[2] El sitio
informativo. Consultado el 22 de diciembre de 2021 de https://bit.ly/33H8x5q
[3] Noticias de
Cuautla. “Impiden en asamblea que
Araceli Xixitla fuera candidata en Tetelcingo” Consultado el 22 de
diciembre de 2021 de https://bit.ly/3pj9zwO Cfr. Andrés Salas. “Matan abusos y malas costumbres el progreso en Tetelcingo” Consultado el
22 de diciembre de 2021 de https://bit.ly/3mqNRoV